Hoy os vamos a acercar un poquito más al maravilloso mundo de la restauración de muebles antiguos. Cada mueble tiene una historia, y formar parte de ella es como leer una novela en cada una de las piezas que vas restaurando. Esta historia está contada por las mujeres de una familia; abuela, madre, tías y la más joven, Mar, que finalmente lo trajo a nuestro taller y nos regaló esta historia que comienza en Almería hace más de 120 años..
Ella recuerda muy bien que sus tías, «las Gómez» lo trajeron «Dios sabe cómo» desde Almería a la que fue su casa durante más de cuarenta años en la Calle Gaztambide… Esto encontramos en la trasera del mueble. Nos choca mucho que alguien se entretuviera de esta forma en poner la palabra Madrid.. ¿a vosotros no?
Este mueble Alfonsino siempre fue «el mueble de la entrada». Su casa fue cuartel durante la guerra civil, y al parecer la puerta frontal quedó reventada. Fue su abuela María quien puso con muy buen gusto esta lámina sobre un panel de madera en sustitución, que le da una alegría y distinción muy especial. Estaba en perfecto estado, solo hubo que hacer una limpieza muy suave. Aquí vemos un detalle de media limpieza.
En la calle Gaztambide vivió sus mejores años.. desde allí, como si ese hueco a la entrada de casa hubiera estado esperándole siempre, vio llegar del colegio día tras día a Mar y sus hermanas. En él descansaron sus muñecas y sus libros de texto. En su cajón, aún quedan manchas de tinta de sus estuches con lápices y plumas, y olor a sacapuntas y goma de nata MILAN..
Pasaron los años y volvió a cambiar de casa un par de veces más.. y volvió a encontrar siempre el sitio perfecto en su casa actual a las afueras de Madrid, desde donde vino al taller algo sucio y desvencijado pero manteniendo su carácter y elegancia.
En él está casi todo lo que se puede relatar en un informe de restauración: chapas abombadas, pérdidas de elementos constructivos, desencolados, manchas, grietas, ataque de xilófagos en la trasera y por supuesto pasmado de barniz y pérdida del acabado. Todas las técnicas que hemos empleado las encontraréis en los talleres online: Cuaderno Nº 6 y Cuaderno Nº7 (Técnicas de Restauración I y II)
Comenzamos como siempre por retirar los elementos de talla aplicada a ambos lados, en este caso unas preciosas»cartelas», y numeramos debidamente para colocarlos en su sitio una vez limpios y barnizados. También desmontamos la puerta, herrajes, base del cajón y bandejas interiores para su limpieza.
Hacemos lo mismo con los cuatro balaustres del frente, en parte porque hay que encolarlos primero, y limpiarlos en profundidad después, pero también para poder acceder al cuerpo del mueble limpiamente.
No utilizamos lija bajo ningún concepto para no perder la pátina natural de la madera, con nuestra mezcla casera de limpieza Triple A y neutralizado apropiadamente, este es el resultado.
Y en esta imágen ya barnizados y listos para montarlos en el mueble.
Después seguimos con las chapas que faltan tal como os explicamos en los talleres online, y a continuación con la reintegración volumétrica en la moldura de la tapa, patas y grietas.
Cada día que pasa se van viendo los resultados. Mar me pregunta qué tal va, y Vanessa y yo le mandamos las fotos de la UCI. Tiene muchos más abombados de chapa de lo que creíamos, así que vamos dando pequeños golpecitos con la uña y marcando cuando suena hueco, para no dejarnos ninguno sin encolar.
Aquí tenemos uno de ellos antes y después de la intervención.
Y en la siguiente imagen la reintegración de la grieta a lo largo de todo el lateral derecho antes, durante, y después de la reintegración volumétrica, cromática y barnizado.
Lo mismo hemos hecho con el cajón. En esta primera imágen el barniz estaba completamente pasmado. Tras la limpieza vemos la preciosa veta de nogal en el frente del cajón.
En las bandejas interiores, a pesar de la limpieza siguen quedando manchas blanquecinas que reintegra Vanessa a rigatino, siempre dejando claro que es una reintegración y que se pueda diferenciar siempre, aunque lo hace tan bien que a veces cuesta verlo!
Mar nos hace una visita para verle, le apasiona la restauración de este mueble, es algo muy especial para ella, y mientras seguimos trabajando en él, le acaricia y nos sigue contando más detalles de su historia.. cuanto más le conocemos, más nos ensimismamos en trabajar en él.
Una vez acabada la reintegración volumétrica con resina de las grietas, encolado de las mil y una chapas que se habían levantado y realizada la limpieza y neutralizado de la madera, ya podemos entonar las piezas nuevas y prepararlas para barnizar.
Cada elemento por separado. Es entretenido pero merece la pena montarlo perfectamente limpio y acabado al final. Siempre nos preguntáis cuántas manos de goma laca.. las que pida el mueble.
Y tras días y días de cariños y mimos ya vemos nuestra cara reflejada en él, es el momento de montar todas las molduras, cartelas, columnas, herrajes, bocallaves y rematar pequeños detalles.
Ojalá María y sus hijas»las Gómez», Maruja, Matilde y Carmela, pudieran verle de nuevo, en todo su esplendor como en aquellos tiempos, y ocupando de nuevo el lugar de honor. En vez de libros y muñecas ahora albergará vajillas y cristalería, eso sí, la de las grandes ocasiones, no es para menos, nos dice Mar emocionada. Sin duda ha sido uno de esos trabajos que nos ha enamorado y enriquecido. Vanessa y yo hemos disfrutado como pocas veces del proceso de restauración de El mueble de la entrada.
Gracias a Mar Carretero, por confiar en nosotras para esta pieza tan importante para ti, y a Antonio Miranda por estas preciosas fotos que nos hizo en el taller.
Marta dice
Me ha gustado mucho este post.
Como dices, se ven muchos pasos muy interesantes y el cambio es sorprendente.
Yo sigo aprendiendo con vosotras 🙂
Gracias.
Yolanda dice
Gracias Marta, si, este trabajo ha sido todo un intensivo!
Antonia aguilar dice
Estrenando vuestra nueva página web!!!!! Estoy «bicheando» me gusta mucho.
Que interesante la restauración del mueble.
Muy bien explicado!!!!
Yolanda dice
Siiii, ya por fin está en marcha, me alegro que te guste Nonia, un abrazo!
ESTHER ABREU dice
Mi enhorabuena¡¡ Un gran trabajo. Profesionalidad y cariño y ahí está el resultado. Fantástico. Me ha transportado a otra época. Lo visualizo presenciando innumerables escenas, unas entrañables y otras curiosas. Y es que cuando el trabajo se hace con ese cariño, con esa implicación, cuidando cualquier detalle…no se puede esperar un resultado mejor.
Me parece maravilloso vuestro trabajo. Conseguir sacar, no solo vetas, colores…etc sino el ALMA del mueble. Habéis conseguido devolverle su esplendor y su significado.
Y cómo diría un gran amigo: EXTRAORDINARIO.
Yolanda dice
Muchas gracias Esther, tiene gracia, en restauración llamamos ALMA a la estructura que hay bajo el chapeado, en este caso sería como el corazón de la pieza :D. Un abrazo!
La Alcoba de María dice
Hola Yolanda!!!
Enhorabuena por este gran trabajo realizado con tanto rigor. Una maravilla el mueble, la historia y como habéis desarrollado vuestro trabajo. Con esa delicadeza y pasión, con la que he tenido la suerte de verte trabajar, y que estos muebles se merecen.
Un post completisimo digno de una gran profesional como tu !!!!
Besos
Yolanda dice
Gracias María, a ver si conseguimos trabajar juntas en algún proyecto, sería estupendo! Un abrazo guapa!
Miriam de Uruguay dice
Me apasiona todo lo referente a restauración y maderas. Y este post me pareció fascinante. Sobre todo, el amor que han puesto en la tarea. Por supuesto que el mueble es un tesoro, que estaba muy desmerecido y que son unas Profesionales increíbles. Pero destaco que, cuando podemos el alma en la tarea, el resultado es Arte.
Yolanda dice
Gracias Miriam, normalmente cuando cae alguna pieza así siempre la hacemos con cariño, pero el saber tantos detalles y la gran amistad que nos une con la propietaria nos ha hecho disfrutar aún más de él. Un beso.
Tete la de Germania dice
Que pasada nenas.
Como me gusta leeros, veros y hasta casi oleros desde aqui haciendo lo que haceis, guapas mas que guapas. Me poneis los dientes largos que me arrastran y babeo como una cria chica. Me guata mas leeros a vosotras que al Voge, demonios.
Yola guapa, pronto se pasara Ali por aqui, porque no te animas y hacemos un trio intensivo en el taller?.
Un besazo resinoso.
Tete.
Yolanda dice
Ojalá, estoy deseando ir para allá. Un besazo enorme!
Miguel Carretero R. dice
El mueble de la entrada.
Madrid, 25 de septiembre de 2015
Hola Vanessa y Yolanda
Si. Como ya habréis supuesto, soy Miguel, el padre de Mar, que quiere daros las gracias a través de este blog. Aunque…ya nos veremos.
En su día leí el… ¿Cómo se llama?…”Informe de restauración”, que a mí me pareció pura poesía. Pero he querido esperar a ver el resultado de vuestro trabajo para escribiros, hoy regresado de mis viajes ha sido el día.
¡¡¡ Maravilloso !!!
Por supuesto que mi agradecimiento no es solo por el trabajo bien hecho sino, mucho más, por el cariño que habéis puesto al realizarlo que se refleja en el precioso informe cuya lectura me ha emocionado.
Me encanta que lo hayáis incluido en el capítulo de “Muebles con historia” y la parte de historia que contáis, pero yo tengo mucha más historia. Claro…sesenta años de convivencia con el mueble de la entrada dan para mucha historia.
Junto a él besé por primera vez a Carmela, la madre de Mar. A su lado salían a recibirme cada día, a la vuelta del trabajo, mis seis hijos y mi pastor alemán. Frente a él todos los años, por Reyes, formaban fila ocho niños, nerviosos, esperando con ansia ver los juguetes.
Figuraos si hay historia
Hoy día, el mueble ocupa un lugar más prominente en casa de Mar. Pero siempre seguirá siendo el “Mueble de la Entrada”.
Por todo os estoy muy agradecido. Y que sigáis siendo tan lindas.
Un beso. Bueno… mejor dos.
Yolanda dice
Miguel.. no tenemos palabras, solo decirte lo afortunadas que nos sentimos de haber formado parte de este trocito precioso de vuestras vidas, un fuerte abrazo.
Elena dice
Acabo de leer esta entrada y aquí estoy con lagrimas en los ojos, que preciosidad de historia la del mueble en si, la contada por vosotras y bueno ya la contada por Miguel me ha trasportado a esos tiempos que …. es que nos gusta recordar y mas todas esas cosas tan bonitas de nuestra infancia, juventud y que es una maravilla el mueble y vuestra restauración es magistral, como me gustáis por vuestro hacer y como personas, de verdad.
hechizos de amor dice
excelente trabajo de restauracion, las cosas quedan como nuevas pero manteniendo su estilo clasico, me parece importante esta restauracion ademas de que es un buen metodo de conservacion de los implementos que tienen valor historico e incluso sentimental. saludos
Saber mas dice
He estado googleando un poco por artículos de alta calidad o entradas en webs sobre estos contenidos. Explorando en Google por fin encontré este blog. Con lectura de esta información, estoy convencido que he encontrado lo que estaba buscando o al menos tengo esa extraña sensacion, he descubierto exactamente lo que necesitaba. ¡Por supuesto voy hacer que no se olvide este blog y recomendarlo, os pienso visitar regularmente.
Saludos
Yolanda dice
Muchas gracias, eso intentamos, contar historias a partir de las piezas que nos llegan y que sea algo más que una restauración. Un saludo!
BOHEMIAN AND CHIC dice
Muy interesante. La restauración, en gran parte, es una actividad por la que se consigue renacer parte de la historia de un hogar o mueble en concreto. Si te encanta el mobiliario de tu antiguo hogar y te gustaría incorporar a tu nuevo piso, existen muchas empresas que conseguirán el resultado que tu deseas.
Yolanda dice
Efectivamente, nosotras pensamos que los muebles de un hogar son parte del legado de una vida, tienen una historia compartida con quienes convivieron con ellos y por tanto restaurarlos es una forma de mantener ese legado vivo. Devolverles la luz es nuestra misión, y adaptarlos a su nueva vida para que sigan enriqueciendo el espacio que comparten con nosotros. Muchas gracias por tu comentario.